Como un plumón,
liviano, casi ingrávido
somos invitados al vuelo.
Vuelo interior.
Como un plumón,
aparentemente frágil,
aceptamos nuestra vulnerabilidad
como punto de partida hacia la hondura.
Cómo un plumón,
que apareció engalanando el instante
y se llevó el viento más tarde,
nosotros, permeables a la Vida que nos sostiene y ama...
A.M.A.