Tranquilamente regaba esta mañana el jardín con la compañía
infaltable de Negrita y Catalina (perra y gata respectivamente) cuando
aparece el picaflor que diariamente visita este lugar.
Es evidente que esta vez tenía calor porque aprovechó mi regada para bañarse.
Me quedé quieta para que no se asuste y no llamar la atención de Cata, la cazadora eterna.
Así pasaron un par de minutos: él bañándose y yo inundando un sector de tan quietecita, jajaja!
Sus plumitas de colores to
rnasolados cada vez iban adquiriendo más y más brillo, precioso!
Cuando finalizó increiblemete se acercó a mí y con unos aleteos rápidos
de agradecimiento a la altura de mi pecho salió apurado iniciando su
día...
Puede "parecer" una situación demasiado simple y sencilla.
Pero es que allí está la Vida: en la suma encadenada de todas esas
vivencias diarias, cotidianas, a veces placenteras y otras dolorosas que
se nos presentan para despertar.
Si no es aquí y ahora...cuando?
A. M. A.
Dice Dora Gil: "La vida nos sostiene constantemente.
Todo nos nutre; el aire, el sol, la tierra, el agua,
las personas, las situaciones, las emociones, los pensamientos... están aquí para despertar nuestra consciencia infinita.
Pero... ¿Estamos aquí para aceptar ese alimento?
¿O seguimos buscando algo más lejos,
siempre más lejos?"
Foto de un picaflor muy similar al que hoy visitó el jardín. Es de Alec Earnshaw.